En la actualidad, los empresarios mas audaces y talentosos reconocen lo importante que es estar presentes en Internet para alcanzar los objetivos generales del negocio y comienzan poco a poco a interesarse más por los asuntos relacionados a sus sitios web y a las estrategias de mercadotecnia propias de este moderno sistema de comunicación. Desde las microempresas hasta los grandes corporativos, cuentan ya muchas empresas con un sitio web, aun cuando en algunos casos se trate de sitios muy básicos y de poco contenido, mal diseñados y orientados a un publico inexistente.
Podemos identificar fácilmente las etapas por las que ha atravesado este proceso de integración de las tecnologías de Internet con los procesos comerciales y operativos de los negocios. Tenemos una primera fase en la que se da a conocer esta tecnología en México y en la que sólo las compañías visionarias, se arriesgan y deciden adoptar esta nueva tecnología. Una segunda etapa en la que el correo electrónico y las páginas web comienzan a jugar un papel muy importante en la actividad comercial de los negocios, se crean nuevos estándares y la tecnología es adoptada prácticamente por toda la comunidad empresarial por las importantes ventajas que ofrece. La tercera y dramática fase de desencanto, en la que las compañías descubren que el Internet no es la panacea para hacerse rico de la noche a la mañana y que para tener éxito, los planes de negocio para vender productos a través de una tienda en línea deben tomar en consideración otros factores tradicionales de mercado y no únicamente la implementación de un carrito de compras. Y finalmente, una cuarta etapa en la que las empresas, después de haber vivido una serie de experiencias, muchas de ellas no precisamente gratas, han dado cuenta que las páginas web sí son efectivas para generar más negocios dentro y fuera del país, pero que la fórmula debe incluir un elemento de promoción.
Efectivamente, además de aquellos nuevos términos como el del Internet, el web, el correo electrónico, las páginas web, los sitios, el hospedaje, el ancho de banda, el comercio electrónico, las tiendas en línea y los portales, los empresarios y directivos están comenzando a integrar a su argot corporativo otras palabras tales como visitas, tráfico, estadísticas, posición, promoción, buscadores y desde luego, el término más citado recientemente entre la comunidad empresarial que es el del posicionamiento web. Todos quieren estar en Google, pero no solamente estar ahí, sino que quieren estar en las primeras posiciones, de preferencia en el primer lugar de las listas de resultados. El posicionamiento web es precisamente eso, una estrategia de promoción que tiene como objetivo situar una página web dentro de los primeros lugares en los resultados que arrojan los motores de búsqueda. Por lo general, una vez diseñada la página web, los empresarios asumen que tendrán inmediatamente el posicionamiento.
Tener el propósito de que su página web sea la primera en aparecer en la lista de resultados de los principales buscadores no es una mala idea, lo criticable en todo caso es la forma en la que intentan alcanzar este objetivo. Por lo general, las empresas buscan soluciones fáciles, prácticas y económicas. Se limitan a solicitarle a algun diseñador o ingeniero en sistemas que sepa cómo registrar su página web en buscadores y esperan que ese servicio sea relativamente económico. Nunca pasa por su mente que el posicionamiento sea en realidad algo mucho más complejo que una simple solicitud de registro. En lo referente a posicionamiento en buscadores, los empresarios y directivos quieren saber sólo una cosa: el costo del servicio. Nos hemos dado cuenta de que por lo general, no les interesa conocer en qué consiste este servicio y rara vez formulan alguna pregunta en referencia a cómo se logra posicionar una página web o si existen alternativas. Se van directo a preguntar el precio, probablemente tras suponer que las actividades que involucra esta labor no tienen por qué ser complejas y que encontraran facilmente quien realmente lo sepa hacer.
Todos desean estar en las primeras posiciones pero muy pocos están dispuestos a pagar lo que vale este servicio, así es que el posicionamiento está reservado por el momento únicamente para aquellas empresas que desean hacer bien las cosas en sus campañas de mercadotecnia en Internet y están dispuestos a invertir en el proyecto los recursos que resulten necesarios. Podría pensarse que el problema del posicionamiento en países como México se reduce a la falta de una cultura tecnológica y a la escasa experiencia en este campo, sin embargo éstas no son las únicas causas, ni tampoco las de mayor peso creemos. En la práctica, son muy pocas las empresas que cuentan con un amplio presupuesto para invertir en la promoción de una página web. En la mayoría de los casos, el presupuesto se reduce a unos cuantos miles de pesos y las posibilidades de aumentar este presupuesto son mínimas o inexistentes.
Las técnicas de diseño web y mejores prácticas para el posicionamiento de páginas web en buscadores quizas pueden ser aprendidas a través de cursos de especialización en este campo. Esta tecnología está disponible para cualquier ingeniero en sistemas, gerente de mercadotecnia o diseñador de web que desee prepararse en el uso y aplicación de las técnicas de posicionamiento. Sin embargo, son contadas las agencias de diseño web que existen en México capaces de proveer este servicio adecuadamente y esto no cambiará hasta que las empresas se decidan a invertir en los proyectos y puedan pagar lo que cuesta este servicio. Por esta razón, la inmensa mayoría de los servicios de posicionamiento web que se ofrecen actualmente en nuestro país son ineficaces. Las soluciones que se proponen son como recetar un analgésico cuando lo que en realidad se requiere es una cirugía mayor. Las empresas están recibiendo un servicio equivalente a lo que están pagando, ni más ni menos, y por lo general no están quedando conformes con los resultados obtenidos, ya que la mayoría de los empresarios y directivos esperan que sus páginas web aparezcan listadas en las primeras posiciones y esto no está ocurriendo así.
El posicionamiento web es bastante complicado, mucho más complejo de lo que usted se imagina, por lo que las empresas comenzarán a obtener mejores resultados hasta el momento en que acepten que el posicionamiento en buscadores no es sencillo de lograr, se decidan a invertir, contraten los servicios de una firma especialista como Branding MIX, México, y, muy importante, sigan al pie de la letra sus recomendaciones. Eso es todo lo que se necesita para estar en la primera posición en Google.
