Debora Meltrozo, de 28 años de edad, engatusaba a los borrachos hacia su domicilio, les emborrachaba con sustancias narcóticas y les utilizaba para conseguir realizar sus espantosas fantasías sexuales, según la página web elborregrafo.com
Los hombres eran hospitalizados después de sus ‘románticos’ encuentros con Debora. A todos se les diagnosticó envenenamiento e indicios de abusos sexuales. Todas las historias que relatan sobre sus relaciones con Debora son idénticas. Todo lo que recuerdan es que ella les invitaba a su casa para tomar unos bielitas. Después les ataba los genitales y hacía lo que quería con ellos.
Aquiles Castro un borracho, de 40 años, sufrió una herida grave en el pene y su prometida le dejó después del incidente, ahora sigue ahogándose en alcohol junto a su amigo, para olvidar todos los traumas que le dejó la violadora.
Aquiles y su amigo, aseguraron que estan 'traumados' y necesidad ayuda psicológica.
Aquiles y su amigo, aseguraron que estan ‘traumados’ y necesitan ayuda psicológica.
Washington Tipán, de 32 años, tuvo más cuidado. Cuando fue a visitar a la mujer a su apartamento, llamó a un amigo y le contó que tenía una cita y que a ella probablemente no le importaría montar un trío en la cama. Washington se despertó en el hospital la mañana siguiente y sus genitales estaban totalmente hinchados.
A pesar que ninguno de los ebrios denunció a la mujer ante la policía, se pudo capturar y ubicar a la violadora gracias al satélite PEGASO.