Quirino Ernesto Paulino Castillo firmó bajo juramento con el Departamento de Justicia de los Estados Unidos de América, a través de su agencia "Drug Enforcement Administration", D.E.A., un acuerdo Federal que le obliga a ser testigo contra las personas por él mencionadas, vinculadas a su red de narcotráfico y lavado de activos.
No debemos dudar que entre las figuras por él señaladas en la investigación que se le efectuó en los EE.UU., que tuvo por resultado una rebaja significativa en su condena, se encuentre el ex mandatario Leonel Fernández.
Las declaraciones vertidas de forma reciente por el ex narcotraficante Quirino Ernesto Paulino a través de la emisora radial la Z-101, debieron ser autorizadas por el Departamento de Estado de los EE.UU.
Lo descrito implica que el ex gobernante Leonel Fernández podría ser extraditado y juzgado por lavado de activos y corrupción administrativa en territorio estadounidense, como ha pasado con los ex presidentes Alfonso Portillo, de Guatemala y Manuel Antonio Noriega, de Panamá.
Las autoridades dominicanas no entienden lo delicado de la situación, están buscando justificaciones infundadas a los hechos recientes, que lo único que obtendrán será agravar más la situación del ex presidente Fernández e implicar al presidente Danilo Medina en un caso de conspiración, contra el Departamento de Estado de los EE.UU., en el caso Quirino Ernesto Paulino.
Lo aconsejable seria que el Procurador General de la República, con el apoyo de la administración del presidente Medina, realice las investigaciones pertinentes y tome las medidas oportunas.